Del bar de vinos a la fábrica
El bar de vinos Carpano se convirtió en la atracción central de la ciudad y en 1820, Giuseppe Bernardino Carpano, sobrino de Antonio, decidió darle una estructura legal a su empresa creando la "Fabbrica di Liquori e Vermut Giuseppe Carpano".
Entre 1840 y 1888 la reputación del vermut creció y una copa de Carpano se convirtió en el aperitivo por excelencia y la bebida favorita de Turín.
En 1898, mientras el negocio estaba en continua expansión, los hermanos Luigi y Ottavio, tercera generación de los Carpanos, al darse cuenta de las limitaciones de su pequeña tienda de vinos artesanal, decidieron montar una fábrica.